Detección de Fugas en Circuitos de Refrigeración

Las fugas de hidrocarburos y otros fluidos en los circuitos de refrigeración pueden aparecer por diversos motivos, tales como fugas en intercambiadores de calor, compresores, reductores, bombas u otros equipos.

Motivos por los que medir la concentración de hidrocarburos en circuitos de refrigeración:

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Seguridad

Las fugas de hidrocarburos en los circuitos de refrigeración suponen riesgo de generación de atmósferas potencialmente explosivas. Esto es de especial importancia cuando estas fugas alcanzan una torre de refrigeración, puesto que, por una parte, las torres de refrigeración cuentan con balsas abiertas con una gran superficie que facilita el contacto de los hidrocarburos con el aire ambiental. Por otra parte, someten al flujo de agua a un gran caudal de aire a contracorriente que facilita que los compuestos más volátiles pasen a formar parte de esta corriente de aire. Este caudal de aire tiene una gran velocidad, lo que, unido a las condiciones de muy alta humedad ambiental características de estos equipos, hace que una fuga puntual pueda ser de difícil detección por parte de los detectores de gas convencionales.

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Eficiencia energética

Las fugas en los circuitos de refrigeración suponen una pérdida directa en la eficiencia de los equipos de refrigeración al dificultar la transmisión de calor. Esto se traduce en mayores consumos energéticos.

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Mantenimiento

Los hidrocarburos ensucian los rellenos, las distribuciones de las torres de refrigeración y resto de componentes del circuito. Los rellenos de las torres de refrigeración solo admiten agua en circulación con muy pocas ppm (partes por millón) de hidrocarburos.

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Ahorro

Las fugas pueden suponer un costo importante debido simplemente a la pérdida de producto.

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Medioambiente

Los efectos de los vertidos de hidrocarburos sobre el medioambiente pueden ser muy variados, dependiendo de la composición química del producto, entorno natural, etc. Las legislaciones al respecto son cada vez más restrictivas.

Soluciones:

 

John Cockerill Hamon cuenta con una experiencia de muchos años tanto en el diseño de equipos de refrigeración como en soluciones para la detección de hidrocarburos y aceites en agua, lo que nos permite poder proponer para cada caso concreto la solución más adecuada.

En el caso de las torres de refrigeración, las fugas pueden tener dos efectos:

  • Los hidrocarburos más pesados, casi siempre de menor densidad que el agua, pueden acumularse flotando en la balsa. Esto puede hacer que una muestra del agua en circulación no sea muy representativa del contenido total de los hidrocarburos fugados.
  • Los componentes más volátiles se evaporan fácilmente ayudados por la gran aireación que producen los ventiladores, pudiendo llegar a suponer una pérdida constante de producto, relevante y difícilmente detectable.

Un análisis de laboratorio puede dar una idea muy completa de la situación, no obstante, para la operación de la instalación es necesario:

  • Un sistema de detección en continuo que permita saber que en todo momento estamos dentro de los límites requeridos.
  • Tiempo de respuesta rápido, para poder automatizar la respuesta ante una fuga y minimizar sus consecuencias.
  • Alta fiabilidad. No solo en cuanto a posibilidad de avería, sino también para evitar posibles falsos positivos.

Otros puntos importantes que considerar:

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Fácil instalación

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Bajo mantenimiento

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Bajos costos de operación, con el menor consumo de reactivos, gases de calibración, gases de arrastre, etc.

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Consumo de agua neto nulo.

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Requisitos específicos del proyecto, tales como certificación para áreas peligrosas (ATEX, IECEx, UL, etc.)

Detección de hidrocarburos por fluorescencia ultravioleta:

Una tecnología puntera es el control por fluorescencia UV, basada en las propiedades espectrales únicas de los hidrocarburos, especialmente en aquellos ricos en componentes aromáticos. El gas arrastrado y los sólidos presentes en la muestra no emiten fluorescencia, lo que elimina el problema de las falsas alarmas que se producen con otras tecnologías.

Más información: https://www.esindus.com/x-one-fs-and-x-one-ds-png/

Detección de aceites e hidrocarburos en flotación:

Sistemas de refrigeración abiertos: El detector ID-223 puede detectar fugas de intercambiadores de calor en canales abiertos, en los puntos de toma de agua, de refrigeración o en los puntos de descarga.

Sistemas de refrigeración cerrados: Es posible la instalación de un detector ID-223 en un tanque de muestreo en un by-pass.

Detección de fugas de glicol:

Cuando existe un circuito secundario de refrigeración con líquidos tales como el etilenglicol, existe el riesgo de que se produzcan fugas o arrastres de producto. Su detección puede realizarse mediante la adición de aditivos fluorescentes y un analizador en continuo. Al igual que sucede con los aceites e hidrocarburos, el glicol no debe de alcanzar nunca el relleno de las torres de refrigeración.

 

Otras soluciones de analítica y automatización para circuitos de refrigeración:

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